SE IMPECABLE EN TUS PALABRAS
Nuestras palabras constituyen el poder que tenemos para crear.
Honrar nuestras palabras….Lo que sale de nuestra boca es lo que somos. Si no honramos nuestras palabras no nos estamos honrando a nosotros mismos, y si no nos honramos a nosotros mismos, no nos amamos. Honrar nuestras palabras es ser coherentes con lo que pensamos y con lo que hacemos. Nos hace ser auténticos y respetables ante los demás y ante nosotros mismos.
Nuestra intención se manifiesta a través de las palabras, lo que soñamos, lo que sentimos y lo que realmente somos. Sabemos muy bien que son como una espada de doble filo: pueden crear el sueño más bello o destruir todo lo que nos rodea. Uno de esos filos es el uso erróneo de las palabras, que crea un infierno en vida. El otro es la impecabilidad de las palabras, que sólo engendrará belleza, amor y el cielo en la tierra. Según cómo las utilicemos, las palabras nos liberarán o nos esclavizarán aún más de lo que imaginamos.
Ser impecable con nuestras palabras significa utilizar nuestra energía correctamente, es decir haciéndolo en la dirección de la verdad y del amor por uno mismo. Si se llega a un acuerdo con uno mismo para ser impecable con nuestras palabras, eso bastará para que la verdad se manifieste a través de uno mismo y limpie todo el veneno emocional que pueda existir en nuestro interior.
Cuando somos impecables con nuestras palabras, nuestra mente deja de ser un campo fértil para las palabras que surgen de la magia oscura, pero sí lo es para las que surgen del amor. Podemos medir la impecabilidad de nuestras palabras a partir de nuestro nivel de autoestima. La cantidad de amor que sentimos por nosotros mismos es directamente proporcional a la calidad e integridad de nuestras palabras. Cuando somos impecables con nuestras palabras, nos sentimos bien, somos felices y estamos en paz.
Podemos trascender el sueño del infierno sólo con llegar al acuerdo de ser impecable con nuestras palabras.
Ahora mismo, con este mensaje, se está “plantando” una semilla en tu mente. Que crezca o no, dependerá de lo fértil que sea tu mente para recibir las semillas del amor. Tú decides si llegas o no a establecer este acuerdo contigo mismo: ser impecable con tus palabras. Nutre esta semilla, y a medida que crezca en tu mente, generará más semillas de amor que reemplazarán a las del miedo. El Primer Acuerdo cambiará el tipo de semillas para las que tu mente resulta fértil.
Este es el primer acuerdo al que debes llegar si quieres ser libre, ser feliz y trascender el nivel de existencia del infierno. Es muy poderoso. Utiliza tus palabras apropiadamente. Empléalas para compartir tu amor. Usa la magia blanca empezando por ti. Dite a ti mismo que eres una persona maravillosa, fantástica. Dite cuánto te amas. Utiliza las palabras para romper todos esos pequeños acuerdos que te hacen sufrir.
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