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Extracto….
Una enseñanza que nos hará comprender que al igual que cuidamos nuestro habitad, nuestro entorno, nuestra casa, de igual manera debemos aprender a saber Amar, haciéndolo desde la impecabilidad de nuestras palabras y el cuidado de nuestros pensamientos, sentimientos, emociones, obras y acciones, todo ello en equilibrio y armonía, llevados a cabo bajo los principios REIKI y otras premisas que sin duda alguna les son complementarias, tales como:
- Seamos honestos con nuestras propias acciones.
- No nos pongamos a “arreglar” lo que veamos en otros sin antes haber “arreglado” lo nuestro propio.
- Cuidemos nuestra “casa interior”. No juzguemos lo que vean nuestros ojos, sino lo que sienta nuestro corazón a través de nuestros sentimientos y emociones.
- Seamos agradecidos con todos, dando gracias por lo poco o lo mucho que recibamos.
- Seamos siempre antorcha y potenciemos su luz para que la oscuridad de ese nuestro propio mundo interior sea cada vez menor.
- Entendamos que la Virtud es siempre entrega sin desear recibir nada a cambio. Es espontánea y no pide.
De esta forma sabremos bien que “nunca veremos fuera lo que no poseemos dentro”… Es decir, si por ejemplo no somos generosos, nunca nos daremos cuenta de la generosidad que otros intentan mostrarnos, o si no somos solidarios, nunca veremos la solidaridad que llevan a cabo los demás… y así con todas las Energías o Virtudes.
“no digáis debemos hacer, ¡Hacedlo! No lo digáis a otros, comienza con tu propio ejemplo …” Y de ahí la importancia de esta enseñanza REIKI, …hazlo con Humildad y Sencillez que en definitiva nos es otra cosa que “callar” nuestras virtudes, permitiendo de esta forma que los demás las descubran.
El saber del Dios del Amor, del AMOR INCONDICIONAL, DEL AMOR AL OTRO, lo encontraremos en nuestro propio “Corazón”, en nuestra propia ejemplaridad de hacer el bien, porque todos somos iguales ante ese Dios, aunque tengamos cuerpos diferentes o practiquemos distintas religiones, y somos iguales porque en todo Ser humano habita el Amor de ese Dios, ÚNICO, UNIVERSAL.
Entiende que donde hay necesidad de Agua surge un Manantial, donde hay necesidad de Caminar surge un Camino y donde hay necesidad de Dios surgen los Ángeles, sus “Mensajeros”, nuestras Virtudes o Energías de Luz.
Un abrazo de Paz, Armonía y Amor
AURI
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