HAMALIEL, regente del mes de Agosto

HAMALIEL

(Foto: Obra de Miguel A. López Melgarejo)

Llamado también AMALIEL, este Ángel de los Meses que está regido por Laopusem se traduce del hebreo como “Perdón de Dios”. Según los Dictados de Humiel es el representante de Agosto, siendo la vibración cromática afín a su Energía el color dorado, la gema el ojo de tigre y el diamante, y el perfume el narciso (símbolo de la Contemplación).

Es el Ángel que otorga la cualidad, a veces dura, de saber “autoperdonarnos” en los fallos, cosa que debemos saber hacer antes de poder perdonar a otros. Sin nosotros ser capaces de hacerlo con nosotros mismos difícilmente lo sabremos hacer efectivamente con nuestros semejantes.

Según el Libro de Samahel, en el capítulo IV, este Ángel (al igual que en el Apocalipsis de Juan) “viste de Sardónica”, gema que estaba representada en el pectoral del Sumo Sacerdote de Israel.

Es Hamaliel el Ángel del Perdón. Fue el nº 34 que dictó el Libro de Samahel, precisamente la página 564 del original.

Sello

SELLO DE HAMALIEL

ORACIÓN PARA HAMALIEL (AMALIEL):

“Me he visto en el Espejo de mi vida
y hoy he comprendido que debo Amarme sin oponerme,
pues he Sabido que Amaliel me ha llenado con su luz adamantina
cual crátera de esplendoroso diamante.
¡Alabado sea el Nombre Universal
por haber hecho de mí el recipiente de su pequeña Luz
en la cual se pueden fijar los ojos de la sencillez!
La Sabiduría del Amor me ha hecho comprender
que esta consciencia me permite suavizar mis fallos,mis aristas,
mis máculas, mis complejos sentimientos bajos
y mis secretos impronunciables:
Hoy sé que estoy Perdonado porque he sabido que me he perdonado.
La Misericordia del Impronunciable Señor de todas las cosas
visibles e invisibles mora en mi corazón y ha impregnado mi alma,
y mi consciencia hoy festeja con inconmensurable alegría
este regalo que me era pertenecido desde siempre
¡Gloria a este hallazgo que estaba tan oculto
que no podía sospechar de su existencia!
Hoy me baña la Honestidad, la autoestima, el Honor y la dicha;
pues he sido liberado – a causa de la Comprensión de mi alma –
de las cadenas que me han hecho corregir mi equivocada actitud
ante las flaquezas mías y de mis semejantes.
¡Que el autoperdón esté conmigo!
¡Que el perdón esté con todos los que conozco!
Amén. Amén. Amén.”

 

MES DE AGOSTO

(Fuente: Foro abierto de amigos de camino)

Sexto mes del antiguo calendario romano, llamado Sextilis hasta que un decreto del Senado lo cambió por el del emperador Cayo Julio César Augusto, pues en este mes colocó a las legiones bajo su mando, convirtió a Egipto en provincia romana, puso fin a las guerras civiles, fue cónsul y entró triunfante en Roma por tres veces; y fue el mes en el que murió.

Consagrado a la diosa cazadora, Diana (o Artemisa), protectora de las amazonas, y más tarde, de las brujas. Hermana gemela de Apolo, dios del sol, recompensa con la inmortalidad a sus adoradores fieles. Diosa salvaje de la naturaleza, protege a los animales jóvenes y puros, a las embarazadas, las hembras preñadas, en vista de los niños que vendrán. Virgen, es la diosa de los alumbramientos, preside el nacimiento y el desarrollo de los seres, Protectora de la vida femenina, se considera su culto derivado del de la Gran Madre asiática. Aseguraba la continuidad de los nacimientos y proveía la sucesión de los reyes. Es probable que Diana, incorporara el culto de Dé Ana (la diosa Ana irlandesa), madre de los dioses.

El mes se inicia con la festividad céltica de Lugnasad (agosto se llama así en Irlanda) o fiesta de Lugh, de cuyo nombre provienen London, Lyon o Lugo. Lug es rey y sacerdote a la vez; en la lucha contra sus enemigos, sale victorioso por el conocimiento y el dominio de la magia frente a la fuerza bruta. En este día se consagran los nuevos druidas y druidesas.

«Lugnasad» significa «recuerdo de Lugh», recuerdo dirigido también a su nodriza, la princesa Taïltiu, de la península Ibérica. Se traduce asimismo como «matrimonio de Lugh» y, en este caso, Taïltiu, como «tierra o suelo», se convierte en la esposa del dios. La festividad marcaba el comienzo de las cosechas y la celebración de nupcias, cuyo pacto duraba un año y un día y podían renovarse cada año en esta fecha. También se establecían, entre las familias, las futuras uniones de los hijos.

La celebración, conocida como «Festival de los Granos», «Fiesta del Pan» o «Festival de los Deportes», agradece el sustento que la Madre Tierra nos proporciona y es un periodo de tregua militar. En ella se bebía hidromiel, bebida de dioses y muertos, porque su consumo produce éxtasis y visiones del más allá.

Lugh no es el dios supremo, es un dios “sin función” porque tiene todas las funciones. Es Samildanach, el múltiple artesano, el «politécnico» que domina todas las artes, todas las ciencias. La organización de los Tuatha Dé Danann (las gentes de la tribu de Dana) está jerarquizada en tres clases:

La función sacerdotal, cuyo rol apunta a lo sagrado, encarnado por Dagda el dios-druida.

La función guerrera, encargada especialmente de la soberanía y que está representada por Ogma, el dios guerrero y Nuada, el dios-rey.

La función artesanal, que se produce por el conjunto de la comunidad, figurada por Goibniu, Credne y Luchta.

Lug está fuera de la jerarquía, no pertenece a ninguna clase en particular, más bien a todas, debido a que puede asumir todas las funciones. Al presentarse ante el rey Nuada para servirle, será sucesivamente carpintero, herrero, guerrero y mago. Después, disputa una partida de ajedrez con el rey, a quien vencerá. Esta partida es puramente simbólica, ya que a través de ella, Lug toma el poder del mundo.

El segundo día de las Kalendas de Sextilis se celebraban, cada cuatro años, los Juegos Píticos en honor a Apolo, vencedor de la serpiente Pitón y dios del Sol, ambos símbolos de Sabiduría.

El día 12, consagrado a Hércules, se sacrificaba un toro (símbolo solar) por la mañana, se le ofrendaba por la tarde y, a la luz de las antorchas, se realizaba una procesión cuyo final incluía un banquete a base de la carne y piel de la víctima. Puede ser éste el inicio de las festividades taurinas veraniegas.

Al día siguiente, el 13, comenzaban las Vertumnales, fiestas de Vertumno, dios etrusco garante del tránsito de las estaciones y los cambios, protector de los sembrados y patrón del comercio.

Este día empezaba también el festival de Diana. Se creía que era la noche más calurosa del año, por lo que se representaba a la diosa con una antorcha en la mano derecha. Los festejos se realizaban en un bosque y las vestales portaban el fuego sagrado. Los devotos construían un improvisado templo en el que dejaban toda la noche sus lamparillas encendidas.

Las fiestas se prolongaban hasta el día 15. La iglesia celebra actualmente, en este día, la Asunción de la Virgen, su “subida” al Cielo en cuerpo y alma, es decir, que María (la Madre) es asunta (asumida) por el cielo.

El día 19 tenía lugar la Vinalia, festividad en honor de Júpiter, en la que se pedía su protección para las viñas ante las tormentas veraniegas que podían arruinar la cosecha.

El 21, las Consuales, fiestas del dios Conso, protector de los silos y el grano. Se ofrecían al dios las primeras espigas y se realizaban competiciones de tiro a caballo, engalanados y liberados de sus tareas comunes, como aún se hace en muchas localidades de la provincia de Valencia con el tradicional “Tiro y Arrastre”.

En línea con la protección de las cosechas, el día 23 era celebrada la Vulcanalia, fiestas del dios del fuego, Vulcano, implorando su protección ante los incendios estivales.

El mes concluía con dos festividades menores: las Opiconsives, el día 25, y las Volturnales, el 27. Las primeras, dedicadas a Ops Consiva, divinidad subterránea de la abundancia agrícola y de los recién nacidos. Las segundas lo eran a Volturno, divinidad arcaica de los ríos y responsable de las temidas crecidas otoñales.

DORADO

Es símbolo de la luz directa del Cielo, en oposición al amarillo que simboliza la luz reflejada (en la tierra). El dorado es asociado desde tiempo inmemorial con la divinidad y la aureola del sol, objeto de veneración en culturas remotas.

Simboliza la abundancia y el poder. También los grandes ideales, la sabiduría y los conocimientos. Color sobrenatural, símbolo de realeza, riqueza, esencia del espíritu divino, apertura espiritual, fortaleza…

Se obtiene de la mezcla entre naranja y amarillo. Revitaliza la mente, las energías y la inspiración, aleja los miedos y las cosas superfluas.

Durante la historia, el oro y sus matices han sido tomados como iconos de la realeza, de la fortaleza y como demostrativo de ciertas deidades y cultos religiosos. Un ejemplo es la representación de los halos (o aureolas) de los santos; el color de la manzana de la discordia que portaba Eris; los orbes solares que llevaban algunos de los dioses egipcios (como Ra); o la piel de Chaitania en la religión hindú. Los iconos de Bhuda son dorados, signo de iluminación y de la perfección absoluta; y el fondo de los iconos bizantinos, reflejo de la luz celestial.

Se asocia a la nueva piel de la tierra, al comienzo de la estación de las lluvias antes de que ésta reverdeciese, es un símbolo del renuevo de la naturaleza. Es el fuego purificador, la iluminación. Evoca toda la simbólica del sol: fecundidad, riqueza, dominio, centro de calor, amor, don, hogar de luz, conocimiento, radiación. Apolo, dios del sol, estaba revestido y armado de oro: túnica, broches, lira, arco, carcaj, borceguíes…

 

 

 

 

 

 

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s