Arcano 15 Energía SOMOK (“El Diablo”)

 

(Fuente: Web de Samahel)

Ángel Místico, cuya energía SOMOK está relacionada con los símbolos y secretos del Arcano Mayor del Tarot llamado EL DIABLO (Tifón) y al planeta Marte. Su nombre se traduce del hebreo como “El que Sostiene”. La Energía Luminosa de este Mensajero exorciza la subordinación, la ruina, la esclavitud, la malevolencia, el fracaso, la violencia, la fatalidad, el autocastigo, la autodestrucción y la falta de principios.

Es el Ángel de las Metas diáfanas, y es atraído con la mezcla del romero y el almizcle quemados sobre carbón como incienso. Su color es el rojo (muy oscuro). 

Cuando se llega a este arcano, es conveniente recordar que nos encontramos en la llamada fase mística, puesto que desde El Ahorcado, se entra en un mundo invertido, en donde los medios materiales resultan ineficaces.

Ya el Arcano XIII, sin nombre, nos indica que la muerte lejos de ser el fin es un comienzo y que en esta vida nueva, las exigencias de la Templanza son las mismas que las de El Ermitaño, pues únicamente cuando se ha tomado conciencia de nuestros propios límites es cuando puedes afrontar a El Diablo, el Arcano que hoy comentamos.

Ante esta carta entramos en la grave tentación de las promesas de los poderes ocultos, tan grandes como los poderes de la luz, pero que tejen lazos con el orgullo humano, que sabemos nos dirigen irremediablemente a una caída, de ahí el arcano siguiente, La Torre, herido por el rayo.

Esta carta nos avisa acerca de la materialidad, la supervaloración de las cosas humanas, el prestigio, la necesidad del dinero, el poder, etc. Es como si negara toda espiritualidad porque se basa en la creencia de que no existe nada más que lo que puedes poseer.

Cuando aparece en primer lugar en una tirada, te indica que estamos sujetos, atrapados a cosas o personas de las que nos podemos liberar, pero que no tenemos el valor de soltarnos. Nos habla de estar ofuscados, y que aún dueños de una potente y obediente energía, no la estamos utilizando.

Te enseña que te encuentras ante un “geiser” a punto de estallar, y que está en tu mano controlarlo o dejar que estalle sin hacer nada por evitarlo.

Nos muestra la esclavitud en que podemos quedarnos si estamos sometidos únicamente al instinto animal y lo que puede ocurrir si utilizamos las fuerzas ocultas olvidándonos de su verdadero fin: EL SERVICIO. Te recuerda que puedes ser Ángel de Luz o Príncipe de las Tinieblas, y que la elección es únicamente tuya.

Los vicios que te pueden sujetar, señalados por las partes del yunque donde están unidas las argollas. Las alas del murciélago, señor de la noche y símbolo de la idolatría y el pavor según la ley mosaica. Para los mayas, encarna las fuerzas subterráneas. En el mundo africano el murciélago tiene un doble sentido. En el positivo, es la imagen de la perspicacia porque puede ver en la oscuridad, cuando todo está sumergido en la noche y en el negativo es una figura enemiga de la luz , lo ve todo al revés porque está suspendido por los pies.

Simbólicamente es el ser detenido en una fase de su evolución ascendente. En china le llaman PIENFU, alas que abrazan o TIENSHU, rata celeste, razón por la que el Rey Jaime lo consideró de buen augurio cuando anido en su tienda y aunque la gente temía lo peor, él se lo puso en su escudo por haber conquistado Valencia en un tiempo record, al considerar su parte positiva y victoriosa. La figura con alas de murciélago y cuernos de ciervo, nos habla de las ambivalencias en las que podemos caer, estar sujetos, sin avanzar.

La letra hebrea relacionada con este arcano es la AIN, EL OJO, que nos dice que no siempre lo que vemos es la Realidad. Mensaje importantísimo a tener en cuenta para no quedar atrapados en El Diablo, significado = El Separador, di-abolei,, lo que nos separa de la Luz, de la visión clara e iluminadora.

Ante el Diablo, observarnos, soltar amarras, tener fe en la Luz interior y no desfallecer ni temer, es lo más oportuno.

Purin Haro Rodrigo de Fortea